viernes, 7 de noviembre de 2014

GUTTER

Siempre se ha creído que la civilización occidental fue la mejor, que estamos representando la cúspide del onocimiento y la filosofía, sólo por aceptar los preceptos de la Decadencia, de los aristotélicos, de Platón y Sócrates.
Los griegos dejaron atrás su esplendor con la llegada de los moralistas y racionalistas, incluso Platón basándose en Hermes y los orientales desvió el gran camino. Luego llegaron los judíos y cristianos, y como buenos parásitos envenenaron la grandeza de los herederos en el norte de la Atlántida e Hiperbórea.
Atrás quedaron la grandeza y gloria de los Dioses de Sumeria y Egipto, los filosófos todopoderosos del Eón del espacio, los padres de la raza humana real, y los extraterrestres creadores y esclavizadores.
Sólo hay que saber mirar en sus mitos más extraños y metafóricos para saber comprender el mensaje, pero pocos saben hacerlo.
Incluso los existencialistas como Schopenhauer, o hasta Kant y Nietzsche se vieron ensuciados por esta estirpe desgraciada, pero ellos tenían el precepto de la raza atlante en sus fueros avernales, al igual que la nueva genereación de la Era Tecnológica.
I.U.O.P.M.E.A.C.O.N.A.E.O.P.E.U


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